viernes, 21 de septiembre de 2012

  • En la quietud dormido contemplando tu cuerpo, ese bello paisaje el tiempo no corre el segundo queda suspendido en ese interminable viaje Mis ojos recorren tus formas delinenando tu figura detallando las mil cosas esos pequeños detalles que conforman mi locura tu cuerpo de fuerte ébano a perfeccion modelado con el color de mi pueblo. Tu piel.. evoca el grato aroma a flor, a café .. a raiz como al despertar la jornada de mi pueblo en las moliendas del maiz Tus ojos de un negro oscuro como las noches sin luna tus labios suave consuelo como brazos de madre que acunan Embelesada por tu piel morena piel de mi raza, mi tierra seducida por tu aroma a hierba fresca a rio, a bosque y canela Llevas todo mi pueblo amado su folklor y su misterio por eso tu nombre es mi credo y mi segunda patria: tu cuerpo

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